jueves, 28 de octubre de 2010

Winett de Rokha

Winétt de Rokha nació en Santiago de Chile el 7 de julio de 1892, con el nombre de Luisa Anabalón Sanderson. Hija del Coronel de Ejército Indalecio Anabalón y de Luisa Sanderson, quien era hija del políglota y gramático Domingo Sanderson, traductor de autores griegos clásicos, como Safo de Lesbos y Ovidio.
Cursó su educación básica en el Liceo Nº3 de Santiago de Chile.
En 1914 decide enviarle un poemario de su autoría al poeta Pablo de Rokha, pero firmando como Juana Inés de la Cruz, pseudónimo que entonces utilizaba, El poemario se titulaba Lo que me dijo el silencio, y pese a que el poeta lo criticase con cierta dureza, no pudo evitar enamorarse de la poetisa, por lo que retornó desde Talca a Santiago en su búsqueda. El 25 de octubre de 1916 Luisa Anabalón y Carlos Díaz Loyola, nombre real de Pablo de Rokha, se unieron en matrimonio. A partir de entonces, ella tomaría el pseudónimo literario de Winétt de Rokha, el cual nunca más dejó de utilizar. La familia se conformó finalmente con sus hijos Carlos (poeta conocido como Carlos de Rokha), Lukó (pintora conocida como Lukó de Rokha), Tomás, Juana Inés, José (destacado pintor), Pablo, Laura y Flor. Varios de ellos murieron prematuramente: Carmen y Tomás, muy pequeños, mientras que Carlos y Pablo, murieron ya mayores y de manera trágica.
En 1944, el Presidente Juan Antonio Ríos, nombra a su marido Embajador Cultural de Chile en América, con lo cual ambos emprenderían un extenso viaje por 19 países del continente. Luego de constantes viajes, se entera en una escala en Argentina que Gabriel González Videla ha sido elegido Presidente de Chile, quien dicta la Ley de Defensa de la Democracia (conocida también como "Ley Maldita") y comienza un período de represión contra el Partido Comunista.
En 1949, Winétt de Rokha regresó a Chile junto con Pablo de Rokha. Llegó al país enferma de cáncer, falleciendo en 1951. En 1953 Pablo de Rokha publicaría Fuego negro, elegía de amor dedicada a su amada esposa.



Obras:

 En 1936, publicó "Lenin", primer poema nacido en Latinoamérica, y escrito por una mujer, dedicado al estadista ruso.

Cantoral fue la escritura de poemas de inspiración sobre la naturaleza, en la que aparecieron rasgos del modernismo. Luego, en El valle pierde su atmósfera, propuso una visión del continente americano, que osciló entre los períodos de conquista y subyugación vividos en el pasado y los períodos de explotación actuales.

Teresa Wilms Montt

María Teresa de las Mercedes Wilms Montt:Nacio en Viña del Mar, el 8 de septiembre de 1893, Murio en París, el 24 de diciembre de 1921. Fue una escritora chilena de principios del siglo XX. considerada precursora Feminista, tuvo una vida dramatica. Rebelde a los valores burgueses de su sociedad, fue internada a la fuerza en un convento; con la ayuda de su amigo Vicente Huidobro, huyó a Buenos Aires, en donde se rumoreaba de que el celebre poeta chileno, la pretendia. Intento ser enfermera en EEUU durante la Primera Guerra Mundial pero es confundida y apresada como espía alemana. Amiga de los escritores Gómez de la Serna, Gómez Carrillo, Joaquín Edwards Bello, Víctor Domingo Silva, Ramón Valle-Inclán.




Obras:

* Es mi diario. Soy yo desconcertadamente desnuda, rebelde contra
todo lo establecido, grande entre lo pequeño, pequeña ante lo infinito... soy yo.



* A pesar de que en mi alma se albergan lastimeras cuitas
se ilumina mi rostro al reír maldigo y es de tal manera armónico el gesto de mis brazos en su apóstrofe dolorido, que diríase que ellos se levantan impulsos de una fuerza extraña,¡Oh siglo agonizante de humanas vanidades! he cultivado un pedazo de terreno fecundo, donde puedes desparramar las primeras simientes destinadas a la Tierra Prometida.



* Una campana impiadosa repite la hora y me hace comprender
que vivo, y me recuerda, también, que sufro".

* Así desearía yo morir, como la luz de la lámpara sobre las cosas,
esparcida en sombras suaves y temblorosas.


* Sabes mi trágica devoción a las leyendas
de príncipes encantados...
Sabes que una música melodiosa y un canto suave me hacían sollozar,
y que una palabra de afecto me hacía esclava de otra alma, y sabes, también, que todo lo que soñé tuvo una realidad desgarradora.


* Agonizando vivo y el mar está a mis pies/ y el firmamento coronando mis sienes

* Nada tengo, nada dejo, nada pido.
Desnuda como nací me voy,
tan ignorante de lo que en el mundo había.
Sufrí y es el único bagaje que admite la barca que lleva al olvido.


* Quiero que en sabia esencia, la Paz descienda sobre mí
y anegue generosa en frescura mi interior carcomido.